La vida de Carolina Gorriz es una historia de amor, moda y superación profesional. Esta emprendedora española es la fundadora de CGC, un atelier en Viena donde produce muñecos, pinta cuadros y desarrolla su vis artesana en todo tipo de artículos, desde broches a bolsos, fundas para gafas y hasta mascarillas. Con este negocio propio, Carolina culmina una trayectoria que arrancó con sus estudios de moda y escenografía teatral en Madrid y continuó con su traslado a Viena por amor en 2002 tras un flechazo durante un viaje de semana.

“Empecé a hacer muñecos para mí, luego para amigos y, antes de darme cuenta, los estaba vendiendo en mercadillos y ahora en mi propia tienda”. Así lo relata Carolina, quien nos cuenta que la mayor parte de su tiempo lo dedica a la creación de este sello distintivo de su negocio. Es lo más demandado y lo que más gusta a sus clientes, sobre todo los diseños de conejos y los modelos personalizados, hechos a partir de los deseos de los clientes. “Los niños me traen sus dibujos, eligen ellos mismos los tejidos y… ¡yo hago realidad sus ideas!”, explica orgullosa y reconoce que cada ocasión es “todo un desafío”. Además, destaca que “aunque se repita el modelo, no hay dos muñecos iguales”, ya que todas las piezas están confeccionadas a mano y nunca repite la misma combinación de colores y tejidos. En cuanto a los materiales que utiliza, todos los tejidos son bio, de algodón y aptos para niños.

Inmersa en su vida de trabajo y familia, Carolina reconoce que no tiene mucho contacto con la comunidad empresarial española, aunque sí tiene círculos de amigos españoles que han mejorado su situación y han progresado en el país. Desde su punto de visa, los españoles en Austria están “mejor considerados” que otras comunidades de emigrantes y nos perciben como “persona alegres, enérgicas y creativas” y “tan capaces profesionalmente o más que cualquiera”.

En lo que respecta a su visión de España desde la distancia, esta empresaria cree que es “desgraciadamente es bastante caótica”, pero esto no le impide volver a hacer hincapié en la valía y capacidades que considera que tienen los españoles y no puede evitar hacer comparaciones: “Tampoco es que aquí todo sea tan profesional y cuadriculado como se podría creer”.

Más información y contacto: Carolina Gorriz de la Calle