Olé Sol, la escuela de español que promueve nuestra cultura en Irlanda


Olé Sol, la escuela de español que promueve nuestra cultura en Irlanda

“Expandir la cultura y la lengua española a la comunidad irlandesa”. Éste fue el principal motivo que llevó a Cristina González a poner en marcha hace más de sietes años Olé School of Languagues, una academia de español para niños y adultos en Dublín que hoy en día también ofrece clases de francés, italiano, alemán e inglés. En la actualidad, imparten cursos en más de 20 colegios y 5 centros cívicos en la capital de Irlanda para un total de 500 alumnos. Tras consolidar su actividad formativa, ahora también organizan campamentos de inglés e intercambios entre colegios de España e Irlanda. Para conocer más sobre la historia de esta emprendedora de origen andaluz y su negocio en Irlanda, no te pierdas esta entrevista que le hemos hecho en su oficina en Dublín.

 

 

– ¿Cómo surge la idea de montar Olé School of Languages?
Olé School of Languages se fundó en junio del 2012. Nació de la idea de expandir la cultura y lengua española a la comunidad irlandesa y de llevar cursos lúdicos y educativos para niños y adultos a los diferentes barrios de la capital. Promover otro método diferente de aprendizaje. Con el tiempo nuestro objetivo se expandiría a conectar la cultura española con la irlandesa a través de intercambios y otros programas siempre de una manera dinámica, lúdica y productiva.

– ¿Cómo ha ido evolucionando la escuela a lo largo de estos años?
Al principio organizábamos cursos sólo en español pero enseguida incluimos los otros idiomas: francés, italiano, alemán e inglés. Con el paso de los años empezamos a contar con otros profesores para impartir las clases y ahora tenemos un equipo estupendo. En la actualidad mi socio Jonathan controla el tema de la administración de empresa, nuestra página web y el servicio al cliente, mientras que yo me dedico a la selección y organización del personal así como al diseño de los cursos.

– ¿Cuales son los tipos de servicios y clases que ofrecéis actualmente?
Contamos principalmente con cuatro líneas de actividad: colegios de primaria de Dublín a los que les ofrecemos nuestro servicio de actividades extraescolares (afterschool), que va destinado a los niños; el adulto que quiere aprender o mejorar el idioma (español, francés, alemán o italiano); campamentos de inglés o estancias mini stay donde niños de 4 hasta los 12 años y adolescentes de 13 a 18 años se alojan con familia irlandesa; e intercambios entre colegios de España y de Irlanda.

En total, actualmente organizamos cursos en 20 colegios y 5 centros cívicos en Dublín y alrededores, 3 sedes centrales. 500 alumnos, 180 adultos y 320 niños. Damos clase de español, italiano, francés, alemán, inglés. En el futuro queremos incluir chino y portugués.

Olé Sol, la escuela de español que promueve nuestra cultura en Irlanda

¿Por qué Dublín? ¿Qué te llevó allí?
Me decanté por Dublín porque era la capital y así no me aburriría, y a su vez, al ser pequeña, podría cumplir mi objetivo de hablar en la calle y así mejorar mi nivel de inglés.

Ese verano había trabajado en la costa y ahorrado lo suficiente para quedarme dos meses en Dublín y mejorar mi inglés hablado y luego volver a España y prepararme las oposiciones para ser profesora. Pronto me entusiasmé con la vida en Dublín y mi nueva rutina y decidí ampliar mi estancia. Ahora hace 13 años de aquello y la verdad es que … ¡han pasado volados!

– ¿Cómo se percibe el español como idioma extranjero en Irlanda?
En nuestra escuela de idiomas, a parte de español, también enseñamos italiano, francés y alemán, pero el idioma más popular, sin duda, es el español. Cada año tenemos más alumnos interesados en aprender español. Las razones varían, desde gente que tiene casa o apartamento en la costa y van allí en sus vacaciones hasta irlandeses que ven su jubilación en España, otros más jóvenes que quieren trasladarse a España por trabajo, y hay otra gran mayoría que tiene pareja española.

– ¿Cómo la perciben España los irlandeses y qué vínculos hay entre ambos países?
A los irlandeses les gusta mucho ir a España. Les encanta el clima, aunque vayan en invierno siempre preparan la maleta con sus pantalones cortos y sus gafas de sol. Los precios, el tomarte un café o una cerveza por menos de 2 euros, eso es impensable aquí en Dublín o Irlanda entera. También creo que gusta mucho la manera de vivir del español, más en la calle, horarios menos rígidos… Y la comida: las tapas, la paella, la calidad de la fruta y verdura… Por otro lado, creo que son personalidades muy compatibles. El irlandés tiende a estar siempre de buen humor. La mayoría de los irlandeses veranea en España, y hay muchos que viajan más de dos o tres veces al año. Allí es como la vida perfecta.

– ¿Qué ventajas o inconvenientes tiene Irlanda para un emprendedor español?
Es relativamente fácil abrir un negocio, pero lo difícil es mantenerlo. Hay que ser muy constante, correr riesgos, analizar muchas decisiones antes de tomarlas y mantener siempre una actitud positiva. Por otro lado, hay mucha competencia, sobre todo últimamente, pero esto te ayuda a estar siempre alerta, siempre aportando ideas nuevas, y actualizándose, para llevar todos los avances de la tecnología y la nueva era a las clases, así como la esencia de siempre.

– ¿Cómo ha evolucionado la comunidad emigrante española en los últimos años?
Al principio, cuando yo llegué en el 2006 no había muchos españoles, pero se ha notado el crecimiento desde 2008 con la crisis económica y, actualmente, hay un crecimiento masivo. No hay día que no oiga español en la calle, cada día somos más.

Olé Sol, la escuela de español que promueve nuestra cultura en Irlanda

– ¿Y la comunidad empresarial y emprendedora? ¿Colaboráis y tenéis sinergias con otros empresarios españoles?
De esto no hay mucho. Se conocen otras empresas, sobre todo de la industria hostelera, restaurantes. Nos saludamos, podemos colaborar a veces, pero yo creo que hay poco. Debería haber más posibilidad de contacto, networking… pero claro, ¡estamos todos tan liados!

– ¿Cómo ves a España desde Irlanda?
Totalmente idealizada. La vida perfecta está allí. Por el sol, la comida, los precios, la familia, la sanidad, la vida fuera… Por otro lado, el problema es la poca posibilidad de desarrollarse profesionalmente.

– ¿En tus planes está volver a vivir a España?
Mi objetivo sería poder tener la libertad de volver a España temporalmente, manejando la empresa desde allí. Y luego pasar temporadas allí y aquí, entre ambos países, cogiendo lo mejor de cada. Si no es posible, ¡habrá que esperar a la jubilación! De momento soy feliz con mi rutina aquí y tengo la suerte de poder volver a menudo.


Más información y contacto: Olé School of Languages