Desde la década pasada, distinguidos chefs españoles se han erigido como embajadores de nuestra gastronomía alrededor del mundo, acercándola al creciente número de seguidores con los que cuenta esta cocina fuera de nuestras fronteras.
El último caso es el del chef vasco Martín Berasategi, que ha consolidado su presencia en América con la inauguración este fin de semana de un Gastro bar -‘Fuego Gastro Bar by Martín Berasategui‘- y un Restaurante -‘Passion by Martín Berasategui‘- en la República Dominicana, fruto de la alianza forjada con la cadena Paradisus de Meliá.
Berasategui es un nuevo modelo de internacionalización gastronómica en Norteamérica, donde destaca Think Food Group, la cadena de restaurantes de José Andrés que ha conquistado a los estadounidenses en el estómago y en la televisión. Con su enseña Jaleo, el asturiano introdujo en 1993 en el país la cocina de tapas y actualmente es copropietario de siete prestigiosos restaurantes -algunos centrados en la cocina española y otros abiertos a gastronomías latinas- que han significado un éxito tras otro para este cocinero y showman televisivo afincado en Washington y un habitual entre los fogones de la Casablanca.
Sin salir de América del Norte, Juan Mari Arzak decidió establecerse un poco más al sur y en 1994 fundó Tezca Zona Rosa, llevando la nueva cocina vasca hasta México. En la actualidad está dirigido por Francisco Flores, pero la carta mantiene intacta la esencia ibérica y los Riojas y Riberas son los protagonistas de su extensa bodega.
De vuelta al Viejo Continente, en 2005, Juan Amador escogió Alemania para abrir su restaurante Amador, dedicado a la cocina molecular y gracias al que fue elegido el cocinero más vanguardista de Alemania en 2008.
Otro reconocido chef español, Sergi Arola, dio un salto internacional más cercano, con la apertura de un restaurante en Penha Longa Resort, un lujoso hotel ubicado en la villa lusa de Sintra (Portugal). Posteriormente, Arola ha sido el primer gran cocinero español en implantar un restaurante en el cono sur de América. Arola Vintetres, un espectacular local que forma parte del hotel Tivoli Sao Paulo – Mofarrej, en Brasil, abría sus puertas en noviembre de 2009.
También lindando con nuestra fronteras, en la capital francesa, se estableció Alberto Herráiz con su negocio Fogón, que obtuvo además la primera estrella que se concedía en Francia a un cocinero español.
Pero, sin duda, el destino estrella actual de los chefs españoles es Oriente, donde el producto español y la cocina de autor nacional están adquiriendo cada vez más relevancia y demanda. Ejemplos de ello son Martín Berasategui, que inauguró en septiembre de 2009 el restaurante Martín en Shanghai, o Josep Barahona, quien abrió su propio restaurante en Tokio en 1997: El Pati de Barahona. En 2001 cambió su nombre por Pintxos Bepo e introdujo en Japón, con gran aceptación, el concepto de comida-pintxos. Cuatro años después vió la luz un proyecto muy singular, L’Estudi, un restaurante de una sola mesa. Su última apertura en Tokio, en 2008, ha sido un restaurante de cocina catalana española bautizado con el nombre de Bikini.
También fue Tokio -donde se calcula que actualmente hay unos trescientos ochenta restaurantes españoles- el lugar escogido por la chef Carme Ruscalleda para su local Sant Pau, inaugurado en el año 2004. El espacio es una réplica del que regenta en Sant Pol del Mar y ofrece cocina catalana estacional combinada con productos frescos de Japón.
En China, Jordi Vallés puso en marcha los fogones del restaurante español Aqua, obteniendo el reconocimiento como mejor chef del año 2009. Y otra próxima apertura en el gigante asiático será la del restaurante View 62, del español Paco Roncero, que iniciará su andadura el próximo mes de mayo en Hong Kong.
No podemos terminar esta radiografía de la alta cocina española por el mundo sin recordar a Santi Santamaría, fallecido el pasado año. Este reconocido chef también dio el salto internacional con gran éxito pero, pese a que su familia se hizo cargo de los negocios tras su muerte, se rompieron los acuerdos que mantenían en el restaurante Ossiano (Dubai) y recientemente ha cerrado Santi, su local en Singapur.
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